El perfil de una personalidad psicópata tiene tres características principales:

»“En la parte interpersonal son manipuladores, mentirosos patológicos, superficiales, egocéntricos y utilizan a los demás para alcanzar sus fines.

» En la parte afectiva no procesan bien las emociones, son incapaces de sentir culpa, no pueden empatizar, y tampoco aceptan la responsabilidad de sus propios actos.

» En la esfera personal tienen una vida muy parasitaria, son impulsivos y antisociales, además de ser promiscuos usualmente”.

De manera habitual, los psicópatas tienen una imposibilidad para adaptarse a las normas y expectativas sociales, lo que los hace aún más peligrosos. Se estima que de 1% a 3% de la población mundial² tiene rasgos de psicopatía, mientras que en la población reclusa, el porcentaje de individuos con psicopatía llega a ser hasta de 25%.

Una de las grandes polémicas en la sociedad gira en torno al conflicto que surge cuando legalmente se intenta dictaminar hasta qué punto los psicópatas son responsables de sus acciones; aunque cabe mencionar que no todos los psicópatas están en la cárcel, y tampoco todos están fuera; por lo regular logran aparentar una vida relativamente común frente a los demás, por lo que en ocasiones, resulta difícil ubicarlos con facilidad; “Puede ser tu jefe, tu marido, tu vecina, tu pareja, lo que sucede es que es más común que, por la magnitud de violencia en sus crímenes, los psicópatas estén en la cárcel”, explica la doctora.

La psicopatía no puede ser únicamente entendida en términos de influencias sociales y ambientales, en algunas ocasiones los factores genéticos también tienen relación en la conformación de los rasgos de una personalidad psicópata. “Hay ciertos factores que son hereditarios, no se hereda un gen del mal, se heredan ciertos rasgos de temperamento.”

En algunas ocasiones el cerebro es hipersensible a ciertos factores medioambientales, “hay gente que sufre abusos en su infancia y lo sobrepasa muy bien y hay otros que no sufren tan severo abuso, pero su cerebro y su persona lo vive muy intensamente, y si a ello se suma la compatibilidad con determinado tipo de genes, eso dispara la psicopatía; es decir, puedes poseer el factor genético pero, si vives en un ambiente que no es hostil, no lo expresas; sin embargo, hemos comprobado que, generalmente, en los psicópatas existe el gen y también historias de abuso”.

Cuando son únicamente factores medioambientales los que contribuyen a que una persona se forme con una personalidad antisocial, sin la existencia de ninguna anomalía en sus genes, se habla de una sociopatía, la cual se encuentra un grado por debajo de la psicopatía; ésta última llega a un grado extremadamente violento. “Los psicópatas son personas que cometen los crímenes más atroces; sin pudor alguno, son mentes criminales, tienen la habilidad de planear, manipular y organizar a los otros”.