Mexicali es una ciudad relativamente joven, asentada en el noroeste del desierto de Sonora; con poco más de 850,000 habitantes, es la capital del estado de Baja California y hace frontera con Caléxico, pequeña ciudad al sur de los Estados Unidos.

El ecosistema de Mexicali es de tipo desértico, con largos veranos muy calurosos que normalmente registran un promedio de temperatura máxima de 41 a 43 ºC a la sombra. El clima imperante en la ciudad es seco, muy árido, con un régimen de lluvias escaso, además de que gran parte de la ciudad se encuentra prácticamente en un hoyo: 11 metros bajo el nivel del mar. Estas condiciones, sumadas al aumento de la temperatura global, equiparan la ciudad de Mexicali con el invento creado para conservar el calor dentro y cocinar alimentos: el horno, pues en ella han muerto cocinados 44 hombres y 2 mujeres en los últimos 4 años, debido a un evento que los médicos llaman familiarmente golpe de calor. De estas personas, 28 fallecieron en la vía pública quienes, probablemente, llegaron a Mexicali de otras partes de la república y no estaban acostumbradas a temperaturas tan altas; 9 más sucumbieron en sus casas las cuales, con seguridad no contaban con un adecuado sistema de aire acondicionado, 2 perecieron trabajando en la construcción como albañiles, uno murió en un asilo y otras 2 personas fueron localizadas tiradas en el desierto. Las edades oscilaron entre 20 y 90 años, predominando los adultos de 31 a 50 años. Del total de los casos, 15% alcanzaron a llegar con vida a una unidad médica, pero los esfuerzos de los médicos fueron inútiles, pues murieron poco después; cuatro personas más fueron encontradas muertas en la calle sin registro oficial alguno sobre su edad, ya que se trataba de indigentes, lo que hizo imposible conocer su identidad.