Se han erigido algunas construcciones religiosas en la montaña. La más notable es la Capilla de San Antonio que, al parecer, se edificó a finales de los años ochenta del siglo XX. Es, muy probablemente, la iglesia ubicada en la mayor altitud de México, pues ha sido edificada a 3,650 msnm.

Es una montaña poco estudiada en todos sus aspectos, pese a que está entre las 15 más elevadas del país (3,920 metros de altitud) y forma parte del grupo de volcanes activos de México. Hasta hace unos cuantos lustros, se hizo el descubrimiento de que el Xocotépetl es un volcán que ha presentado, al menos, dos episodios eruptivos ocurridos en los últimos 10 mil años. El más reciente sucedió hace menos de mil años, incluso, al parecer, coincide con el declinamiento de Tula, la capital de la civilización tolteca. Dicha ciudad se localiza a tan sólo 50 km al norte del volcán, y gran parte de su población la abandonó entre los años 1179 y 1182; la erupción pudo haber ocurrido 100 años antes o 100 después de esta fecha.

La montaña fue venerada en tiempos prehispánicos; los mazahuas la consideran sagrada y se refieren a ella como Nguemore "la montaña sagrada". Por su parte, los otomíes efectúan peregrinaciones a su cima desde tiempo inmemorial y la nombran Gumidi, término relacionado con el fuego, y considerado el centro territorial de los otomíes.