Grayling, A. C., ¿Qué es bueno? La búsqueda de la mejor manera de vivir. México: Océano, 2011, 288 pp.

Unos confían en que los satisfactores materiales son suficientes para tener una buena vida; otros piensan que eso se logra al cumplirse caprichos, como un largo viaje, una cena abundante o beber los mejores vinos; algunos más creen en Dios o en la ciencia.

Pero este tipo de reflexiones ha ocupado también algunas de las mentes de los pensadores más brillantes. El filósofo inglés Anthony Clifford Grayling, docente en el Birkbeck College de la Universidad de Londres y miembro supernumerario en Oxford, publicó su libro ¿Qué es lo bueno? La búsqueda de la mejor manera de vivir, a través del cual busca difundir las posturas que, sobre el problema del bien vivir, se han planteado pensadores de la cultura occidental, desde Sócrates hasta Sartre, pasando por Cicerón, Erasmo de Rotterdam, Voltaire, Rousseau y Diderot.

Como buen divulgador –con escritura ágil y clara, para inexpertos en la materia–, Grayling hace un sucinto recorrido por las ideas que han cimentado el pensamiento occidental, logrando hacer accesible el pensamiento de los filósofos preocupados por responder qué es lo bueno de la vida.

El autor aleja lo religioso del terreno de lo moralmente bueno, aun cuando, tradicionalmente, han sido dos ámbitos imbricados, en los que se privilegia el humanismo y la razón por encima de los dogmatismos, las supersticiones y el pensamiento mágico que sólo produce mentalidades prejuiciosas.

Con una introducción atractiva y ocho amenos capítulos (de esos que se dejan leer fácilmente), el autor nos muestra puntos de vista complejos de la manera más simple, de tal suerte que la comprensión de asuntos filosóficos es posible, incluso, para los más legos en este terreno.

Hallamos así, en las páginas del libro, una narración fascinante sobre el surgimiento de la ciencia en el siglo XVII y su consecuencia más afortunada: la Ilustración del siglo XVIII, cuyo propósito fue que el ser humano pensara y decidiera por sí mismo, para lo cual era necesario el conocimiento organizado que, a su vez, permitió el origen del movimiento enciclopedista.

La obra incluye un recorrido por el siglo XX, un siglo vergonzoso por la ignominia de la guerra, en el que ocurrió un redescubrimiento de la ética y, además, los valores humanistas fueron ponderados al grado de poner en el centro del debate dilemas éticos que cuestionaron los principios de autonomía y libertad.

Sobra decir que en este texto no hallamos recetas para bien vivir; no obstante, el autor considera que lo bueno es “una vida de logros y satisfacción, de placer y comprensión, de amor y amistad; en resumen, la mejor vida humana en un mundo humano, vivida humanamente”.

O’Keefe María (coordinadora), Las finanzas son de todos. Una experiencia de inclusión financiera. México: Museo Interactivo de Economía, 2010, 80 pp.

Producto de la primera exposición temporal del Museo Interactivo de Economía (MIDE), ubicado en la Ciudad de México, en la cual se aborda los temas de las microfinancieras y las finanzas populares.

El libro responde, brevemente, las preguntas: ¿para qué y cómo se debe manejar la educación financiera?; ¿por qué integrarla a los servicios financieros populares?; ¿cuáles son los objetivos y estrategias de las diferentes instituciones? En resumen: ¿qué son las finanzas populares?

También se revisa cómo ha sido, históricamente, el acceso al sistema financiero en nuestro país, se explica la relación entre el desarrollo económico y las finanzas populares, así como su sentido social y estado actual. El texto, que cierra esta reflexión colectiva, abona elementos para entender la importancia de la educación financiera y promoverla.

Todos los ensayos que componen este libro fueron escritos por expertos en la materia y muestran la diversidad de enfoques con que se puede analizar este tema: Beatriz Vaca Domínguez, Gustavo del Ángel Mobarak, Alfonso del Castillo, María Matilde Olazábal y María O’Keefe, quien, además, coordinó la publicación.

El lenguaje claro y la estructura accesible de Las finanzas son de todos… permiten al lector ajeno a los temas económicos acercarse, informarse y, probablemente, interesarse en comprender cómo los servicios financieros repercuten en el nivel de bienestar de uno mismo y de su comunidad; la comunicación no sólo se establece a través de la palabra, sino también con la ayuda de material fotográfico que da constancia de los casos de éxito.

El lector encontrará información adecuada para formarse un criterio y tomar buenas decisiones, y también conocerá breves testimonios de cómo algunos habitantes de distintos estados de la república han participado y utilizado a su favor los servicios de las microfinancieras de nuestro país; asimismo, se presenta un panorama del comportamiento de este tipo de empresas en otras partes del mundo.

Ahorrar, pedir un préstamo, participar en una tanda o solicitar un crédito son acciones que la mayoría de la gente requiere para modificar su nivel de bienestar, crear su patrimonio, alentar el desarrollo económico del país y reducir los niveles de pobreza. Paradójicamente, son las personas de escasos recursos las que en la vida cotidiana no han tenido acceso a dichos servicios.

En la actualidad, existen las empresas microfinancieras que se ocupan de atender a dicho sector, sin embargo, sus resultados han sido muy diversos, dependiendo de cada institución y su filosofía, por ello –apunta esta publicación– su regulación es un punto de análisis fundamental.

La lectura de Las finanzas son de todos significa encaminarse hacia un mejor manejo de las finanzas y contribuye a nuestra formación como ciudadanos críticos y consumidores responsables de los servicios financieros.