La somnolencia excesiva diurna o somnolencia patológica se caracteriza por presentar dicho estado fuera de las circunstancias que dicta el ritmo circadiano, sucede en situaciones inapropiadas y dificulta las actividades laborales o familiares; puede presentarse por privación aguda o crónica de sueño debido a condiciones laborales, como trabajos nocturnos, presencia de enfermedades y, frecuentemente, por patología de sueño, como el síndrome de apnea obstructiva del sueño (SAOS).
En una encuesta reciente, en la Ciudad de México, se encontró que 18% de las personas mayores de 40 años sufren de somnolencia excesiva, mientras que 21% acostumbran tomar una siesta durante el día, y casi 6% usan sedantes para dormir. La somnolencia excesiva es la principal causa de accidentes de tránsito; la Fundación Nacional del Sueño de los Estados Unidos informó que 60% de las personas en dicho país afirman haber manejado bajo estado de somnolencia excesiva y 37% admitieron haberse quedado dormidos o estar cerca de ello, al menos en una ocasión, mientras conducían su automóvil en el último año. La fatiga crónica es aún más frecuente que la somnolencia, con frecuencia se confunde y se superpone. Este término se refiere a un estado de demanda física o cognitiva no recuperado, que puede estar relacionado con trabajo físico e intelectual prolongado, o bien, con enfermedades. |
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