Para pasar la noche del huracán, los turistas fuimos trasladados a un hotel que contaba con un refugio certificado. El refugio para la población general fue instalado en el Centro de Convenciones que recibió aproximadamente a 1500 personas.

Por la noche, los habitantes de Quintana Roo se prepararon para recibir a Emily; el semáforo del SIAT pasó de amarillo a naranja. Se acordaron acciones preventivas como evacuar a todas las personas que habitaban en lugares de riesgo cerca de las playas; retirar semáforos, señalizaciones y anuncios espectaculares; recolectar basura y cortar ramas de árboles cercanas a los cables de energía para evitar accidentes. Asimismo, los medios de comunicación dieron a conocer la ubicación de los sitios designados como refugios.