Un cultivo en constante transición
En contraste con su origen incierto, el futuro
del chile habanero de Yucatán es prometedor,
aunque que en sus inicios tal vez fuera considerado
un cultivo excéntrico; no obstante, con el
tiempo se convirtió en algo indiscutiblemente
unido a la cultura y la identidad regionales; de
tal modo, en la actualidad ha adquirido un valor
agregado, gracias al aprovechamiento que se hace
de la capsaicina como componente de diversos productos
alimenticios, industriales y terapéuticos.
lllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmmm
La agroindustria del chile habanero tiene una oportunidad
única para posicionarse estratégicamente
en el mercado demandante de capsaicina tanto nacional
como internacional (Estados Unidos, España,
Inglaterra y especialmente Japón).
Esta demanda de chile habanero en fresco y de sus
derivados industriales ha propiciado cambios importantes
en la superficie cultivada, la tecnología
del cultivo, en el mejoramiento genético,
la organización y apoyo a los productores,
en los volúmenes, tiempos y calidades que
exige el sector industrial, entre otras cosas.
Un hecho que podría contribuir trascendentalmente
a consolidar la comercialización del producto
sería la obtención de la denominación
de origen del chile habanero de Yucatán,
debido a que el reconocimiento oficial de las características
distintivas de calidad del fruto producido en esa
zona como la pungencia (nivel de picor), el aroma,
el sabor y la vida de anaquel permitirían
diferenciarlo de los chiles habaneros producidos
en otras regiones, para efectos de mercado.
Por otro lado, las instituciones regionales de investigación
jugarían un papel decisivo en esta dinámica
mediante la generación de conocimientos y
metodologías que favorezcan la productividad
y el aprovechamiento integral de este cultivo, así
como en la formación de recursos humanos
especializados en los diferentes eslabones productivos.
Cabe destacar que recientemente se llevó
a cabo un estudio estratégico interinstitucional
del chile habanero, el cual permitió, entre
otros aspectos, definir las prioridades actuales
de investigación y transferencia de tecnología
para esta cadena productiva, así como plantear
las necesidades futuras de conocimiento y tecnología
a mediano y largo plazos, con base a una prospectiva
de las tendencias del mercado.
De aprovecharse esta oportunidad, los beneficios
económicos y sociales para la región
serían cuantiosos; así las expectativas
generadas en torno a este cultivo se cumplirían
y, por tal motivo, los habitantes del Mayab tendrían
que mostrar su agradecimiento con el todopoderoso
Itzamná por tan noble regalo.
