Ecomata-Ecoturismo Mata.

El nerviosismo del viaje comenzó cuando llegué al poblado de Boca de Camichín, el cual se encuentra en Nayarit. Sabía que la expedición estaba a punto de comenzar y horas después me embarqué en lancha rumbo a Isla Isabel, junto con un grupo de visitantes que también deseaba conocer el lugar.
Mientras íbamos en camino, se me vino a la mente que hace más de 30 años este mismo sitio cobijó, por nueve meses, a Jaques-Ives Cousteau; fue gracias él que la isla fue declarada Parque Nacional y en todo el mundo es conocida como La isla de los pájaros.
Estando aquí, imaginaba qué haría Cousteau en este lugar y qué observaba él… Sólo pude estar tres días en la isla, ya que se acercaba un huracán, pero fue suficiente para poder maravillarme con toda la biodiversidad marina y terrestre de este sitio.

Cuenta con dos poblados que tienen una gran influencia sobre ella: Boca de Camichín, a 35 km, y San Blas, que está a 70.3 km.
Por su situación geográfica, Isla Isabel pertenece al estado de Nayarit, exactamente al municipio de Santiago Ixcuintla.

Aun cuando la mayor parte de la isla está formada por cerros y acantilados, ésta tiene dos planicies de forma casi circular, lo cual ha sido el resultado del relleno de antiguos cráteres ya destruidos.
Un rasgo muy particular de esta isla son sus isleos, dos de ellos se encuentran al este de Santa Isabel, con alturas de 20 y 30 metros, los cuales son conocidos como “Las Monas”. Al noroeste, se aprecia otro isleo en forma de media luna, con una altura de 15 metros y 50 metros de largo y es nombrado el “cerro pelón”.
Toda esta fisiografía en conjunto, hace de Isabel un sitio único en las costas del Pacífico mexicano.


Se cuenta que el 1 de junio de 1768, Gálvez se embarcó en la balandra, Sinaloa, para realizar un recorrido desde el puerto de San Blas a la provincia de Sonora, pero los vientos contrarios lo hicieron refugiarse en Isla, dando paso a su descubrimiento y sus primeras apariciones en las cartas de navegación.
A pesar de su cercanía a la costa y a las Islas Marías, la exploración a Isla Isabel no ha sido abundante ni recurrente. La primera cita que hace descripción de ella fue en el año 1899, en un escrito que describe su geografía como tal. Ya en el siglo XIX, la isla empezó a ser visitada por científicos extranjeros y ahí se realizaron inventarios florísticos y faunísticos.
En 1976, la UNAM realizó la primera expedición a la isla con la finalidad de levantar un reporte sobre aspectos geográficos y ecológicos.
En ese mismo año, Jacques-Yves Cousteau también visitó la isla por un periodo de nueve meses y grabó el documental “Las aves de la Isabel”. Todos los datos recabados en las expediciones dieron como resultado un gran acervo bibliográfico para poder ayudar a crear el Parque Nacional Isla Isabel, el cual fue decretado el 8 de diciembre de 1980.


La vegetación que se encuentra en ella está compuesta por zonas de selva baja caducifolia y zonas de pastizal. En estos sitios, el roache y el tomeca o papelillo son las especies de árbol más abundantes, las cuales han llegado a formar grandes extensiones de bosques exclusivos de estas especies. Además de las especies nativas de la isla, los primeros visitantes introdujeron especies vegetales como: piña, plátano, limón, coco, caña de azúcar y papaya.

Las aves conforman el grupo más abundante con cerca de 92 especies registradas, la mayoría de ellas transeúntes que utilizan la isla como zona descanso y refugio durante los viajes migratorios; cerca de nueve especies de aves son residentes de la isla, pero sin duda, éstas son los habitantes más notables, pues a ella llegan para reproducirse entre 17 mil y 20 mil aves pertenecientes a las especies de fragatas, pájaros bobos, pelícanos, rabijuncos, gaviotas, la pericota y la golondrina café.
El otro grupo importante de la isla es el de los reptiles, con sólo siete especies que la habitan. Entre las más abundantes están: iguanas, lagartijas espinosas, lagartijas rayadas y la culebra falsa coralillo.

Gracias a la enorme abundancia de peces, en los alrededores de toda la isla se ha practicado por años la actividad pesquera, y se siguen capturando diferentes especies como: pargos, meros, cabrillas rayas, tiburones y otras especies.
Esta actividad a lo largo de los años se ha mantenido estable, pues se ha realizado de una manera sustentable y controlada; pero, desde hace unos pocos años, la actividad pesquera no regulada ha ido mermando las poblaciones de peces en los alrededores de la isla, provocando una baja significativa, tanto en la biomasa de las poblaciones como en las capturas de los pecadores, lo cual ha ocasionado un desequilibrio en el ecosistema; además, el cambio climático ha afectado desde hace unos años a los arrecifes coralinos con el famoso blanqueamiento de coral, el cual es causado por el calentamiento del agua por periodos prolongados.

La comunidad de Boca de Camichín y, en particular, la Familia Mata, son ejemplos a seguir, pues en ellos existe un compromiso desinteresado de conservación, así como el de dar a conocer el hermoso lugar en donde viven.