Gotas formadas por movimiento de iones, en lugar de electrones, como las celdas fotovoltaicas actuales.
Investigadores españoles del Instituto de Ciencias Fotónicas en Barcelona han revelado que lograron crear unas extrañas gotas 100 millones de veces más diluidas que el agua.
Según César R. Cabrera, primer autor de esta investigación, estas gotas aparecieron en una red láser —estructura óptica que se utiliza para manipular objetos cuánticos—. Este “verdadero líquido”, como lo llaman, es capaz de mantener su volumen y formar gotas en pequeñas cantidades, a pesar de su temperatura externa; además, son menos densas que cualquier líquido.
¿Cómo consiguieron formar estas gotas? Para ello los investigadores enfriaron átomos de potasio a -273.15 ºC, casi el cero absoluto. Cabe destacar que a tales temperaturas es común que los átomos se comporten como ondas y conserven las propiedades de los gases, de tal manera que, al mezclar a temperaturas tan bajas dos gases que se atraen entre sí, es posible formar gotas líquidas ultra diluidas.
Las gotas obtenidas tienen características similares a las gotas de agua con forma y tamaño definidos; además, están extremadamente frías y tienen propiedades cuánticas únicas; por ejemplo, los átomos que las forman no pueden permanecer completamente en reposo en su interior, así que se mantienen en movimiento perpetuo, lo que conlleva a una presión cuántica, haciendo que dichas gotas sean inestables y las evapore un gas en expansión.
Este descubrimiento ayudará a comprender mejor los sistemas cuánticos formados por partículas interactuantes, cuyas características son similares al helio líquido, estrellas de neutrones y otros materiales más complejos.