Desde hace exactamente dos siglos, la generación de luz mediante la electricidad ha diversificado sus fuentes de manera notable.
Recordemos los primeros experimentos de Sir Humphry Davy, científico autodidacta, hijo de un carpintero, quien elaboró, en el laboratorio, una luz cegadora por medio del arco eléctrico producido entre dos electrodos de carbón, alimentado por una batería de celdas –apenas inventadas por Volta– y conectadas en serie, cuya carga se acababa en unos cuantos minutos. Esto ocurría en 1806…
ANTECEDENTES
De aquellos experimentos a la aplicación práctica del arco eléctrico para iluminar pasó un buen tiempo; faltaba inventar las dínamos, los sistemas de distribución eléctrica, etc. Cabe recordar que el centro de la Ciudad de México estuvo iluminado por lámparas de arco colgadas de los postes, ya bien entrado el siglo XIX, y también que el cinematógrafo fue posible comercialmente gracias a la intensa luz de la lámpara de arco.