Investigadores de la Escuela Superior de Ciencias Biológicas-IPN, liderados por el doctor José Jorge Chanona Pérez, trabajan en el desarrollo de un nanosensor capaz de detectar microorganismos patógenos, como la bacteria Staphylococcus aureus, en alimentos, causante de gastroenteritis; al respecto, menciona: "Este biosensor está diseñado a partir de nanotubos de carbono que contienen moléculas capaces de reconocer dicho microorganismo; usamos técnicas de microfabricación, para lograr hacerlo portable y de bajo costo, sin necesidad de que sea usado por personal especializado".
     Dicho nanotubo de carbono contiene un aptámero -molécula de reconocimiento, compuesta por ácidos nucleicos de cadena sencilla, la cual, según su secuencia y las condiciones en las que se encuentra, adopta estructuras tridimensionales definidas-, que reaccionan al contacto con la bacteria Staphylococcus aureus, "así, cuando depositamos en el sensor algún alimento contaminado con ésta, la bacteria se pega a los aptámeros y, gracias a dos microelectrodos, se cambia la conductividad del nanotubo. El proceso es muy parecido al de una prueba de embarazo casera, y requiere un tiempo muy corto.
     Los nanotubos están colocados en una placa de vidrio de bajo costo y fácil de manipular, una ventaja más en relación con otras tecnologías.
     "El prototipo está conectado a una estación eléctrica, pero la idea final es que pueda diseñarse como una especie de termómetro portable. En otros laboratorios ya trabaja para que pueda ser usado con un Smartphone, aprovechando la parte electrónica, así con un adaptador y una app, podríamos tener los resultados de la prueba. Desafortunadamente, en México, hay pocos grupos de trabajo que tienen esta línea de investigación, hasta el momento, somos los primeros que estamos reportando avances en esta área", concluye.

CARACTERÍSTICAS Puede detectar volúmenes muy pequeños de muestra con una sensibilidad muy alta. Sólo se coloca una muestra del alimento y en diez minutos se obtienen los resultados. Es de bajo costo y portable. Para su uso no se requiere de personal especializado.

Más información: jorge_chanona@hotmail.com

El socket es un dispositivo que permite la conexión entre el cuerpo humano y una prótesis; sin embargo, su uso trae complicaciones; por ejemplo, existen periodos de adaptación en los que el muñón se va adelgazando y el socket debe ser ajustado constantemente al tamaño del muñón. En el caso de prótesis robóticas, esto impide que los sensores hagan contacto con las zonas que permiten su movimiento.
     Especialistas del Instituto de Investigaciones en Matemáticas Aplicadas y en Sistemas, liderados por el maestro Hernando Ortega Carrillo, trabajan en un robot que no requiere de sockets, "es un exoesqueleto con dos brazos superiores que facilita realizar tareas en las cuales se requieran más extremidades; incluso, puede servir como una prótesis de brazo. En particular, lo que buscamos son alternativas para que el acoplamiento de este tipo de dispositivos sea de un solo paso y sin ajustes específicos e interfaces".
     Este robot es similar al equipo de seguridad de los juegos mecánicos, en los cuales sólo se baja un soporte que se coloca sobre los hombros y el pecho, asegurando firmemente el dispositivo al cuerpo y, sobre todo, permitiendo el libre movimiento de los brazos o del muñón de la extremidad perdida. "Buscamos desarrollar un dispositivo que, sin interferir en las funciones normales de las extremidades naturales, pueda auxiliar a una persona, realizando ciertas tareas".
     Se adapta a las necesidades de los usuarios; por ejemplo, puede facilitar el desarrollo de tareas como instalaciones que requieran más de una extremidad; también, en aquellas personas a quienes les hace falta una extremidad superior tendría la función de una prótesis.
 

CARACTERÍSTICAS Se adapta a las necesidades del usuario, como el desarrollo de tareas o instalaciones que requieran más de una extremidad. Permite el libre movimiento del cuerpo, incluso, de los muñones de extremidades superiores. Cuenta con un soporte muy similar al de los sistemas de seguridad de los juegos mecánicos, al cual van instalados los brazos robóticos.

Más información: jmas@correo.ifc.unam.mx