Estudian el crecimiento polarizado de las células en hongos filamentosos
Investigadores del Departamento de Microbiología Experimental, del Centro de Investigación Científica y de Educación Superior de Ensenada, se encuentran estudiando la especie fúngica Neurospora crassa que ha dado lugar a muchos conocimientos básicos en otras áreas, además de que se conoce todos sus genes a la perfección.
“Nos encontramos estudiando cómo se forma la pared celular; sobre todo las proteínas que intervienen en este proceso y cómo se coordinan para hacer que todas las enzimas involucradas se vayan hacia el ápice”, explica la doctora Merixtell Riquelme Pérez, líder de este proyecto.
Los hongos filamentosos tienen unas células tubulares y alargadas, en cuyo ápice (extremo superior o punta), se encuentra una estructura de semiesfera que les permite crecer, la cual se llama Spitzenkörper. A partir de ella, si se usa inhibidores, se perturba o se estresa el hongo, ésta comienza a desaparecer o se altera su morfología. “Lo que hemos descubierto es que Spitzenkörper está conformada por vesículas que contienen las enzimas que forman la pared celular y son de diferentes tamaños: las que se encuentran al centro son microvesículas y las del exterior son macrovesículas. Ahora, estamos analizando el impacto que tiene esta organización a nivel celular en la función enzimática en relación con el crecimiento”, explica.
En esta investigación también colaboraron investigadores alemanes de instituciones académicas como Instituto Tecnológico de Karlsruhe, la Universidad de Gotinga, Universidad Ruhr de Bochum, Universidad de Marburgo y la Universidad de Düsseldorf.
Cabe destacar que ésta es la primera vez que se observa tales vesículas y los investigadores esperan poder obtener los recursos para continuar la investigación y analizar cómo se organizan estos hongos a nivel macromolecular para derivar en formas más complejas.