Ciencia y Desarrollo CONACYT
Inicio
Entrevistas
Artículos completos
Ediciones Anteriores
JOSÉ LUIS OLÍN

ENTREVISTA
MUJER DE DESAFÍOS

A María de Lourdes Villers Ruiz siempre le atrajo la naturaleza; cuando niña, soñaba ser guardabosques, después se interesó en el origen de la vida y más tarde en la evolución de las especies; pero lo que verdaderamente la llevó a estudiar biología fue que siempre sacaba diez en dicha materia.

Todavía guardo algunos trabajos de biología que hice con mucho cuidado en secundaria y preparatoria; siempre sacaba diez; no era tan buena en química, por ejemplo, o en matemáticas”.

Para convertirse en bióloga, la joven María de Lourdes desafió a su propia familia, la cual no veía con agrado la vocación de la menor de cinco hermanos. A su madre le preocupaba su futuro financiero.

“De qué vas a vivir” —me decían—. Mi mamá quería que estudiara odontología, pensando en el mercado laboral; mis hermanos, cuando les comenté que quería estudiar biología, me dijeron: —¡cómo, ésa es una sub-profesión!—. Pese a todo, me inscribí a la carrera en la UNAM.” Una vez terminada la licenciatura, Lourdes Villers continuó de inmediato con sus estudios de maestría, también en la máxima casa de estudios. Al término de esta etapa de su formación académica, una importante oportunidad se le presentó: trabajar en el Centro de Investigación Científica de Yucatán (CICY), el cual estaba por abrir sus puertas; un nuevo desafío.

La prioridad del CICY, tras su creación, fue buscar alternativas para revitalizar la región henequenera, “por lo que en principio nos abocamos a conocer la diversidad de agaves que había en la península. Nuestro departamento (Ecología) estaba relacionado con el de Genética, donde estudiaban las posibilidades de crear híbridos y mejorar la planta. Posteriormente estudiamos otras plantas de uso local con el fin de diversificar productivamente a la zona.

“Fue muy beneficioso trabajar en un centro de investigación desde sus inicios, porque no sólo se trataba de idear un plan de trabajo y un proyecto de investigación, sino de construir toda la infraestructura necesaria para mantener vigentes las investigaciones”, recuerda la investigadora.

Con todo por hacerse en el CICY, la doctora Villers Ruiz participó en la creación del jardín botánico y el herbario del nuevo centro de investigación del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACYT).

Al mismo tiempo que hacía investigación en Yucatán, la doctora Villers viajó a Francia a estudiar un doctorado en Geografía y Ordenamiento, en la Sorbona de París y en el Instituto de Geografía de Francia, becada por CONACYT.


SU TRABAJO HOY

Pese a que no pudo convertirse en guardabosques, María de Lourdes Villers Ruiz, desde el Centro de Ciencias de la Atmósfera de la UNAM, trabaja para proteger los árboles de uno de sus principales depredadores: el fuego.

Con apoyo del CONACYT, busca diseñar un modelo que permita determinar el comportamiento del fuego durante un incendio, el propósito de su investigación es contribuir al mejoramiento de los programas preventivos y de combate, en caso de incendios forestales.

El proyecto se desarrolla en el volcán la Malinche, Tlaxcala, y se enfoca específicamente en el análisis de los incendios superficiales, caracterizados porque el fuego consume únicamente lo que llaman combustibles forestales: hierbas, hojarasca y leña suelta; sin destruir por completo los árboles. Del total de los incendios en los bosques, 80% son de este tipo, afirma la especialista.

Para conocer el comportamiento del fuego en un incendio, éste se simula mediante un programa de cómputo, el cual se alimenta con modelos matemáticos y datos sobre las características de los combustibles forestales, del terreno y de las condiciones meteorológicas del lugar.


Entrevista
DRA. MARÍA DE LOURDES VILLERS RUIZ
Investigadora del Centro de Ciencias de la Atmósfera, UNAM. Miembro del Sistema Nacional de Investigadores, nivel I.
desarrollado por quadrato