Información del ecosistema del Golfo de México para tomar decisiones ante derrame de hidrocarburos o cambios ambientales.
Investigadores del Departamento de Microbiología Experimental del Centro de Investigación Científica y de Educación Superior de Ensenada, dirigidos por la Doctora Merixtell Riquelme Pérez, trabajan en un megaproyecto a partir del cual se pretende caracterizar la diversidad fúngica de los sedimentos marinos del golfo de México, con la finalidad de obtener información básica del lugar, para que, en caso de ocurrir cambios ambientales o algún derrame de hidrocarburos, se pueda entender cómo cambia la biota o microbiota asociada a estos ambientes.
“Además de secuenciar la diversidad marina de estos sedimentos, también hemos empezado a aislar algunos de los hongos con el fin de averiguar si tienen capacidad de degradar hidrocarburos u otros componentes tóxicos y, de ser así, utilizar los ejemplares nativos y no introducir nuevos al ambiente”, explica.
Para ello, Riquelme Pérez utiliza tecnologías de secuenciación masiva, “encontramos una levadura que es común en los ambientes marinos, así como hongos filamentosos comunes. Aún no hemos aislado algunos que sean exclusivos de ambientes marinos y la mayoría de ellos también se encuentra en ambientes terrestres; sin embargo, su fisiología confiere una ventaja que les permite vivir en las condiciones del mar”.
Cabe destacar que en este proyecto también participan investigadores pertenecientes a las divisiones de oceanografía, física aplicada y biología experimental y aplicada. “Hay otros grupos que están investigando bacterias y fauna de del golfo de México para caracterizarlas y obtener la información; un trabajo difícil y que lleva aún más tiempo”, menciona.