Ciencia en México 


 Ciencia en México 
      Autores

La Facultad de Estudios Superiores Acatlán-UNAM presentó un resumen trilingüe (español, inglés y hñähñu —otomí—) de esta obra, traducido por Raymundo Isidro Álvarez, profesor de lenguas indígenas de esta institución educativa, quien asegura que el objetivo es enriquecer la cultura de los niños.

Técnica útil para ejercer fuerzas mayores y manipular objetos microscópicos.

Para manipular objetos miscrocópicos, los científicos recurren, desde hace mucho tiempo, a una técnica conocida como pinzas ópticas que “consiste en utilizar luz láser enfocada, con la cual atraen los objetos microscópicos hacia el punto donde la luz se enfoca, para poder atraparlos. Cabe destacar que esta técnica ejerce fuerzas muy pequeñas en las partículas microscópicas”, explica el doctor Pedro Antonio Quinto Su, investigador del Instituto de Ciencias Nucleares-UNAM, quien, además, combinó la técnica con explosiones microscópicas para ejercer fuerzas mucho mayores en las partículas.
     “Con las pinzas ópticas, los objetos microscópicos absorben parcialmente la luz láser, de tal forma que se calientan y son atraídas hacia el punto donde se enfoca el haz, el cual se calienta hasta que sucede un fenómeno físico llamado calentamiento del líquido, por el cual se genera una explosión de vapor que empuja la partícula y, después, se vuelve a repetir el ciclo, pues ésta comienza a acercarse de nuevo al sitio donde se enfoca la luz láser, debido a las fuerzas ejercidas por la luz”, menciona.
     Según el Doctor Quinto Su, con su estudio se busca desarrollar una técnica que genere fuerzas mayores para obtener efectos que con las pinzas ópticas sería imposible: “El año pasado, realizamos estudios para caracterizar mejor las explosiones y analizar cómo son las interacciones con más tipos de partículas; ahora estamos en la etapa de explorar aplicaciones más completas como ensayar la utilización de la técnica con materiales biológicos”, dice.
     “Algunas de las aplicaciones con las que se ha utilizado el método de explosiones microscópicas son: deformar materiales biológicos como glóbulos rojos, medir propiedades mecánicas y, hablando de algunos nanomateriales, se espera que sea posible obtener resultados similares”, concluye.

Primer prototipo desarrollado por mexicanos; se espera obtener imágenes de alta resolución.

Especialistas del Instituto de Física-UNAM, dirigidos por el doctor Héctor Alva Sánchez, trabajan en el desarrollo del primer prototipo mexicano de un equipo de Mamografía por Emisión de Positrones (PEM, por sus siglas en inglés).
     El PEM es un equipo dedicado a hacer estudios de la glándula mamaria en mujeres con antecedentes o sospecha previa de tumor, identificado a través de otras técnicas de imagen; de tal forma que provea imágenes para completar el diagnóstico clínico.
     “Funciona de la siguiente manera: se administra a la paciente —vía intravenosa— un fármaco radioactivo con un emisor de positrones —antipartícula del electrón— y, al encontrarse con electrones, éste se aniquila, produciendo fotones —partículas de la luz de alta energía, que no pueden verse a simple vista—. La imagen que se obtiene con este equipo va a representar la distribución del radiofármaco, y dependerá del tipo de éste el proceso fisiológico o metabólico que se podrá observar”, explica.
     Según el doctor Alva Sánchez, a diferencia de un equipo de mamografía convencional (en el que se obtiene imágenes producidas por Rayos X cuyas proyecciones reflejan la estructura o anatomía de la mama), en el PEM la información que se consigue es fisiológica, porque representa la biodistribución de un radiofármaco y su localización en el paciente, lo que brinda más información para determinar si existe o no, un tumor o una lesión. Esta modalidad de imagen no sustituye a las ya existentes; las complementa, y con ello se pretende ofrecer una mejor atención a las pacientes.
     “En comparación con los equipos comerciales, nosotros queremos implementar algunas novedades de tecnología, entre las cuales se encuentra lograr una mejor resolución espacial (de aproximadamente 1.4 milímetros o menos, si se puede) para poder detectar lesiones más pequeñas; también queremos utilizar detectores de fotones diferentes, con lo que esperamos obtener un mejor desempeño; incluso, pensamos en un diseño más compacto y cómodo”, menciona.
     Por el momento, el equipo se encuentra realizando las primeras pruebas del desempeño de distintos detectores de fotones de manera individual, para entender su funcionamiento y, además, en búsqueda de financiamiento a fin de continuar con el desarrollo de este equipo PEM.

Un equipo de investigadores del IPN realizó un muestreo en 67 puntos de la Ciudad de México, durante un año, para determinar cuáles son las bacterias que respiramos y de dónde provienen. Según los datos obtenidos, en el aire de la capital se encuentran suspendidas 120 bacterias distintas y, para muchas de ellas, no tenemos anticuerpos de defensa. Con la información obtenida se pretende desarrollar un mapa de riesgo microbiológico que alerte a la población y permita prevenir el peligro de contraer enfermedades.

Av. Insurgentes Sur 1582, Col. Crédito Constructor • Alcaldía. Benito Juárez C.P.: 03940, México, CDMX Tel: (55) 5322-7700
Comentarios, sugerencias y dudas sobre este sitio de internet y sus sistemas:
Centro de Contacto y Soporte Técnico  

DERECHOS RESERVADOS © 2019
Políticas de Privacidad