La humanidad siempre soñó con poder volar, y tenemos testimonio de ello desde la leyenda de Ícaro —mitología griega— hasta los dibujos de Leonardo da Vinci (figura 3a); la historia está llena de visionarios que, de alguna manera, contribuyeron a mantener vivo el sueño.3


FIGURA 3. a) La máquina voladora de Leonardo Da Vinci. b) Avión de la era moderna.
Desde el uso general de los metales en el siglo pasado, éstos han sido los materiales principalmente empleados en los aviones. Una combinación de ligereza, resistencia y alta conductibilidad eléctrica y térmica, así como un módulo de elasticidad bajo —69 GPa— son propiedades que convirtieron el aluminio y sus aleaciones en un material clave para construir aviones. Y es que un volumen dado de aluminio pesa menos que un tercio del mismo volumen de acero; sólo el litio, el berilio y el magnesio resultan ser metales más ligeros que el aluminio.1